Una tormenta llamada Lisandra, LA SPRINTER MATANCERA CONQUISTÓ DOS TÍTULOS EN LA VELOCIDAD POR EQUIPOS (F) Y LOS 500 METROS

ARIEL B. COYA
Aunque por fortuna el cielo encapotado no derramó ni una gota, una tormenta tropical llamada Lisandra Guerra pasó, súbita como un vendaval, por el velódromo Reinaldo Paseiro durante la jornada inicial de la Copa Cuba de Ciclismo de Pista.
Fotos: Ricardo López Hevia

CONTRARRELOJ.

Primero, junto a Laura Arias, para coronarse en la velocidad por equipos (f) con crono de 48.910 segundos, y luego para conquistar en soledad la corona de los 500 metros contrarreloj, aventajando con un crono de 36.216 segundos a la mexicana Daniela Gaxiola (37.472).

Fueron, en definitiva, los únicos títulos para Cuba en las seis finales de la primera fecha, pues en las restantes el oro corrió a la cuenta de los pedalistas extranjeros.

Entre los hombres, los mexicanos Oscar López, Bernardo Mejías e Ismael Verdugo (1:04.660), se adjudicaron el triunfo en la velocidad por equipos, secundados por las ternas de Trinidad y Tobago y Ecuador, y Venezuela dominó la persecución por elencos, con el cuarteto de Víctor Moreno, Manuel Briceño, Carlos Linares y Richard Ochoa (4:53.260), además del scratch, con Máximo Rojas.

Mientras, en esa última prueba, pero para damas, otra venezolana, Jennifer César, firmó la sorpresa del día al aventajar en el podio a una multicampeona de la especialidad como Yumari González y a Yudelmis Domínguez, actualmente segunda en el ranking del orbe.

"Sí, me propuse ganar, y gracias a la ayuda de mis cuatro compañeras pude lograr esta medalla de oro", afirmó satisfecha la pedalista del estado Cojedes, quien consiguió aguantar hasta el final los feroces embates de sus perseguidoras.

Fuente: www.granma.cubweb.cu